- Pff... Chicas, no sé
vosotras... ¡Pero yo estoy demasiado nerviosa! –Dije sentándome en la cama,
sonriente. Me dejé caer, el cuerpo me pesaba, estaba un poco cansada. No sé
porque, pero en cuanto entraran los chicos por la puerta con Louis y viera que
estaba bien, me echaría una pequeña siesta....
- ¿Nerviosa de qué? Por lo
que va a pasar mañana, o por lo que quieres que pase hoy con Niall. –Me
preguntó Diana con tono acusador mientras me miraba elevando las cejas y ponía
una sonrisilla.
- Emm... Jajaja. Eh... ¿De
qué hablas Diana? –Dije entre risas producidas por el nerviosismo. No
había hablado de esto con nadie, ni siquiera con mi madre. Podría decirse que
en parte si, estaba nerviosa, nerviosísima, con lo que pasaría con Niall...
¿tal vez esta noche? Pero ya estaba resignada, algún día iba a pasar si o si,
ya fuera hoy, mañana, o dentro de un mes. No me apetecía hablar de eso y menos
ahora, así que tenía que empezar con mi “actuación” e intentar cambiar de
tema.- ¿Qué hablas de hoy con Niall? No te entiendo... Yo me refiero a lo de
mañana. Las intrigas me ponen mala Para eso, que no me lo hubieran dicho... –Dije
mintiendo. Esperaba que mis clases de actuación, que tomaba desde los seis
años, sirvieran de algo.
- ¿Qué es lo que va a pasar
hoy con Niall? –Preguntó Kelly con cara extrañada. Me quedaron mirando
fijamente. Lo sabía. Estas chicas ya se olían algo…
Ya no podía más con esto y me
puse a pensar y a reflexionar. ¿Qué iba a ser de mi carrera como actriz, si no
era capaz de mentir a mis mejores amigas? Vale Katia, vale... ¡Es que es eso! Son
mis mejores amigas, ¿para qué iría a mentirles? Sé que ellas me apoyarían en
todo lo que les contara. Vale Kat, respira, estas a punto de contárselo, tú
puedes. Salí de mi meditación, después de notar un peso en mi hombro; la cabeza
de Kells se posaba en este y me dispuse a hablar.
- Vale chicas... No estoy muy
preparada para hablar de esto, siempre lo he tenido como tema taboo, así que...
Ahí va. –Dije resignada a la vez que cogía aire como podía. Del nerviosismo se
me entrecortaba la respiración.
- ¿Estas bien Kat? –Me
preguntó Kelly con una mirada rara.
- Podría estar mejor. –Le
respondí lo más sincera que pude.
- Venga Katia, suéltalo...
Bueno, te ayudaré. –Dijo Diana mientras se subía a mi cama y se sentaba a lo
indio.- A ver, primero de todo, no me llames cotilla. Pero escuché lo que le
dijiste a Niall de lo del hotel... Salí de la cocina a coger mi bolso y lo escuché
todo. ¡No me culpes, tengo el oído muy fino! –Dijo medio gritando, como en
señal de disculpa.
- No... No te preocupes, si
teníamos que hablar de esto tarde o temprano. –Dije intentado relajar el
ambiente.- Bueno, lo suelto ya, ¡por qué si no esto va a durar siglos! –Exclamé
intentando liberar mis tensiones.- A ver, como ya sabéis... Soy virgen y bueno,
creo que ya estoy lista para hacerlo con Niall y... Pff... –Dije poniéndome
roja. De repente empecé a pensar en un cúmulo de cosas y sentí como una lágrima
se deslizaba por mi mejilla.
- Katia, ¿¡qué te pasa!?
No... ¡No llores tía! –Me pidió Kelly mientras alzaba mi cabeza con sus manos y
me sacaba las lágrimas.
- ¡Jopetas Kat! ¡¡No te
pongas así, que si te veo, yo también lloro!! –Me dijo Diana haciendo puchero
mientras se acercaba para abrazarme.
- Es que... Tengo miedo.
Mucho miedo. –Dije con la voz entrecortada, intentando parar de llorar.
- Pero... ¡¿Por qué?! ¿Qué ha
pasado? –Me preguntó exaltada Diana.
- Tengo miedo de todo lo que
pase cuando los chicos se vayan. Tengo miedo de que Niall se fije en cualquier
otra chica, otra chica preciosa y quedarme yo sin él, porque le amo más que a
nada y sé que estoy pensando estupideces, pero la duda siempre ronda. –Dije
entre pequeños sollozos. Verdaderamente pensar en eso, me dolía en lo más
profundo de mi corazón.
- No digas
bobadas tía... Sabes que eso no pasará y si pasa, será dentro de mucho,
demasiado tiempo. –Dijo Kelly recalcando las últimas palabras.- Yo tengo el
mismo temor con Louis, pero mientras no haya indicios de lo contrario, prefiero
no pensarlo. Aunque tan solo llevemos juntos como una semana... –Dijo parando
en seco mientras sacaba el móvil del bolsillo.
- Típico, Kelly y su móvil
forever together. –Dijo Diana con tono de resignación mientras soltaba unas
risillas que hicieron que se rompiera la tensión.- Bueno, a decir verdad, yo
también tengo miedo con Zayn, le quiero mucho y me dolería... ¡Pero chicas! ¿Qué
tonterías estamos pensando? ¡¡Qué son nuestros chicos!! Ellos no nos harían
eso... Lo sé. –Rechistó eufórica. Y reí ante sus reflexiones.
- ¿O estas insinuando que
quieres hacerlo con él solo para “atarlo” más a ti? –Preguntó Kelly rompiéndome
los esquemas. No había pensado en eso en ningún momento. Simplemente me parecía
rastrero hacer eso.
- No. Nunca haría eso. –Dije
negando con la cabeza.- Es solamente que creo que ya ha llegado el momento.
Hemos pasado tanto tiempo juntos… Me ha demostrado que puedo confiar plenamente
en él y lo mucho que me quiere. –Plasmé una sonrisa al recordar todos esos
momentos junto a él en todo este tiempo.
- Pues ya está Kat, ¡no tienes por qué preocuparte por
nada! –Me dio Kelly un beso fuerte en la mejilla.
- Cierto dejemos de pensar
tonterías... Volviendo al tema principal... ¡No sé qué voy a hacer! Haber
chicas no os riais, pero no sé qué va a pasar. Yo siempre he pensado que tiene
que ser bonito, especial, precioso, ya no solo para mí, si no, para los dos.
¡¡Pero es que yo no sé nada de esas cosas!! Comprenderme, pronto estaréis en mi
situación.-Exclamé poniéndome roja, podía sentir mis mofletes calientes.
- Que cortante... A ver,
nosotras siempre nos hemos contado todo y yo pienso que este tema lo deberíamos
llevar como cualquier otro, ¿no? Es la cosa más natural que pasa cuando dos
personas realmente se quieren. –Comentó Kells con el tono más sincero dejando
de lado por un momento el móvil y mirándonos fijamente.- Y vosotros
os queréis. Punto. –Terminó volviendo de lleno al móvil. Lo que había
dicho era totalmente cierto, debería dejarme llevar, pero no solo por la
locura, sino también por él. Lo que sentía por él, era algo superior, algo que
no había sentido antes por nadie. Él me complementa, me entiende.
- Si, hablemos como
“adultas”. –Dijo Diana poniéndose seria.- Ya que estamos, hablemos bien del
tema. A ver, esto no solo le va a pasar a Katia, también nos va a pasar a las
dos Kelly, por lo que debemos comprenderla. Ella estará ahí, cuando
nosotras necesitemos hablar del tema. –Dijo mientras me cogía de la mano y
mandaba una sonrisa de complicidad.
- Gracias chicas. –Esbocé
agachando la mirada. –Bueno… ¿Qué debería de hacer? ¿Llevo yo la iniciativa?
¿Sería muy brusco? ¿O mejor dejo que sea cuando tenga que ser, sin forzarlo
demasiado? –Pregunté sin cesar. Me estaba desesperando, esto de no saber que
hacer es una agonía... Bueno, al fin y al cabo, todos tenemos nuestra primera
vez.
- Yo creo que... deberías que
él lleve la iniciativa, y eso, no lo fuerces, que sea cuando tenga que ser, las
cosas forzadas siempre acaban mal. –Dijo Kelly mientras que no apartaba la
mirada del estúpido móvil.
- Exacto, pienso exactamente
lo mismo que Kelly. Tu estate relajada, él no permitirá que te pase nada. –Dijo
Diana con tono comprensivo mientras que ponía su mano encima de la pantalla del
móvil de Kelly como para que prestara atención, esta bufó resignada.
- Vale, vale, ya tengo una
idea… Menos es nada. –Dije mientras volvía la mirada a las chicas. Ya se me
había ido la vergüenza. Después de esta conversación, sé que tengo toda mi
confianza con ellas y que nunca me dejarían ni me defraudarían. Me acerqué a
las dos y las abracé lo más fuerte que pude.- Gracias chicas, os quiero.
- Nada cielo, ya verás como
todo sale bien. Nosotras también te queremos. –Dijo Kelly con una sonrisa,
contestando por las dos. Diana asintió. Yo les devolví la sonrisa.
- Bueno Kells, ¿noticias de Louis?
–Le pregunté cambiando totalmente mi expresión. Seguía preocupada, a pesar de
que Liam ya nos había dicho que estaba bien.
- Si, ya están viniendo, se
han retrasado, porque supuestamente han ido a recoger unos regalillos. Chicas,
¡estamos llenas de sorpresas! –Me respondió contenta dando botes en la cama.
- Bueno... A saber que nos
traen. Tengo miedo. –Dijo Diana riendo con ganas.
- A saber... –Dije con la voz
desvanecida. Sentí como mi móvil volvía a vibrar en el bolsillo de mi pantalón.
En un pequeño reflejo dirigí rápidamente mi mano hacia el móvil y otra
vez... ese dolor me inundó todo el cuerpo.- ¡Me cago en...! –Exclamé con tono
doloroso. Saqué el móvil como pude; había recibido otro mensaje.
*Mensaje de Niall*
Creo que no lo sabes... No sabes cuánto es el amor que siento por ti. Cuando me vaya no sé cómo voy a poder sobrevivir sin sentir tus besos, tu piel, tu ser... Estaré en plena agonía, no podré soportarlo. Será difícil de llevar, aunque no sentiré nada, nada, porque mi corazón se queda donde tu estés, mi corazón es tuyo y de nadie más, tú me lo has robado y tuyo será por siempre jamás. Ha pasado tan solo una media hora y ya te echo de menos, te necesito aquí conmigo, para poder saciarme de ti. Solo te necesito a ti, tus besos, tu amor, para ser la persona más feliz del mundo. No me imagino una vida sin ti, no tendría sentido. Te quiero. Te amo mi vida ♥
A estas cosas me refería... ¿Cómo podía ser tan jodidamente perfecto? Hasta la última de mis terminaciones nerviosas estaba llena de energía, me sentía completa. Rápidamente me levanté de la cama, salí corriendo de la habitación y me dispuse a bajar las escaleras. Y le vi, le vi empezando a subir las escaleras. Me aceleré, bajé más rápido, con tal mala suerte que cuando me quedaba un escalón para llegar a él, tropecé. Me esperaba el golpe del siglo, pero sentí unas manos abrazándome y protegiéndome de la caída. Abrí los ojos y me encontré con los suyos, mirándome fijamente mientras me regalaba una de esas sonrisas que solían matarme. Anclé mis manos a su cuello, acercando sus labios junto a los míos para sumergirnos en un acalorado, perfecto y largo beso. Subí mis manos hasta llegar a su cabellera, entrelazando estas con su pelo y otra vez, como no, volvió el dolor, dolor que hizo que con la otra mano le tirara levemente del pelo y le mordiera suavemente el labio inferior. El soltó una de sus manos de mi abrazo, para sujetarme el mentón y acariciarme la mejilla. El beso se empezó a intensificar, sentí como todo mi cuerpo se erizaba y él lo notó. Se fue separado lentamente mientras seguía dándome pequeñas caricias por el moflete.
- Te amo. –Me dijo en un pequeño susurro mientras que apoyaba su frente con la mía. Tenía los ojos cerrados.
- Te adoro. –Le dije imitando su postura. Había sido uno de los momentos más perfectos de mi corta vida, no lo cambiaría por nada, por nada. - Subamos. –Le propuse, pero el carraspeo de alguien y el sonido de la puerta me interrumpió. Cuando salí de la burbuja que me había creado, y me giré para ver mi alrededor, pude ver a mi hermano mirándonos desde el sofá, donde se encontraba sentado. Lo que me reflejaba su rostro no era ni mucho menos enfado, tenía una gran sonrisa en la cara, supongo de haberme visto feliz, eso me daba a entender que ya aceptaba completamente nuestra relación.
- Creo que eso va a tener que esperar, los chicos ya han llegado cielo. –Me respondió mientras que tiraba de mí, para bajar las pocas escaleras que quedaban. Vi asomarse a Louis con Harry y Liam por detrás que llevaban consigo un par de bolsitas.
- ¡¡Louis!! –Grité lo más alto que pude mientras me abalanzaba a él para darle un gran abrazo.
- ¡¡Hola Kat!! –Me dijo extendiendo los brazos para poder recibir mi abrazo.
- ¡Aaaauch! ¡Cuidado que me duele un poco! –Me dijo con tono quejica. Llevaba una pequeña tirita blanca por encima de su hinchada nariz.
- Lo siento Louis... –Me disculpé mientras me separaba ya de él y me dirigía a saludar a Liam y después a Harry. Sentí como las chicas bajaban rápida y alocadamente, para ver a los chicos.
- ¡¡Cariño!! ¡Amor, amor, amor! ¿¡Qué tal estas!? ¡Lo he pasado fatal, me tenías preocupadísima...! –Dijo Kelly mientras llegaba a él. Louis lo único que hizo, fue cogerla por la cara suavemente y plantarla un beso. Los chicos ante esto, se quedaron flipando, sus expresiones eran... raras, pero de sus bocas no salió ni una pregunta. Creo que los hechos, ya habían mostrado todo y no había nada que comentar. Una imagen vale más que mil palabras.
- No te preocupes cielo, estoy bien. –Le respondió después de su pequeño beso, para luego darse un profundo abrazo.
- ¿¡Qué tal estas Louis!? Ya mejor, ¿no? Todos estábamos preocupados por ti. –Le dijo Diana acercándose a él a darle otro abrazo. Este, se lo dio y después, rápidamente envolvió a Kelly con un brazo; al parecer, la había echado de menos.
- Bueno, bueno... Hoy creo que estoy surtido de abrazos, ¿no? –Dijo mientras le daba un beso en la cabeza a Kelly. Yo, ya había saludado a Liam y me dirigía a saludar a Harry, con el que todavía, tenía que hablar.
- Hola. –Le dije un poco seca mientras que le daba un beso en la mejilla.- ¿De que teníamos que hablar, Harry? No será nada malo, ¿no? –Le pregunté un poco preocupada. Tenía miedo cada vez que me decían el típico “tenemos que hablar”. Esas cosas casi siempre no acaban muy bien… Así que cuanto antes mejor.